jueves, 29 de septiembre de 2011

Basses decididos en otoño

Es curioso observar el paso de las temporadas de pesca  y analizar el comportamiento de los peces. Si hay algo aceptado en la pesca del bass es que los mejores lances con el centrárquido aparecen en primavera y otoño. Es algo que casi nadie duda.

OTOÑO, TIEMPO DE SWIMBAITS

Si bien en lo que se refiere a la pesca con swimbaits si que percibo una clara diferencia entre ambas estaciones.
En las jornadas primaverales se pueden conseguir buenas pescatas. Pero también es muy común sufrir días de auténtica desesperación, días de continuos seguimientos de grandes hembras  al  swimbaits pero sin llegar a embocarlo.
Sentir como el corazón se acelera al ritmo que recogemos y vemos esa mancha negra y alargada a escasos centímetros del artificial es muy bonito, pero en otras ocasiones puede minar la paciencia del más tranquilo. Así ocurre tanta veces hasta que nos descubre y se acaba la angustia, el bass se aleja y el pescador asume el desencuentro con más o menos resignación.

CAMBIOS OTOÑALES

Todo lo anteriormente descrito cambia con la llegada del otoño. Los “lunkers” son menos propicios a las continuas persecuciones, al acoso e intimidación pero sin rozar el señuelo. En estos meses, cuando la temperatura va descendiendo y los días acortándose, los basses se muestran más decididos.
Las pausas y cambio de velocidad de recogida si que servirán de ayuda, no dudéis de que si hay un bass cerca del swimbait, no es por curiosidad, por proteger al nido, la prole, por defensa del territorio, no. Ese pez está muy decidido a embucharse el engaño. En ocasiones ni siquiera tendremos la ocasión de advertirlos, pues serán tan rápidos y decididos que no habrá tiempo para deleitarse.

BLACK-BASS A PRINCIPIOS DE OTOÑO

Si nos encontramos ante un otoño común, en los primeros meses (finales de septiembre y octubre), nos decantaremos por big baits flotantes o bien de hundimiento lento (slow-sinking).
La temperatura del agua desciende un poco con respecto al verano y esto hace que los grandes basses comiencen a dejar las profundidades y se sitúen más cerca de la superficie. La temperatura se hace ideal y esto aviva el apetito del pescado. En cuanto a la localización del pescado, hay que tener presente que durante el otoño los basses se desplazan mas que en otros momentos del año, frecuentemente persiguiendo a sus presas.
Los peces de los que se alimenta el bass serán de mayor tamaño en esta época del año, lo que da una idea de la talla de los artificiales a emplear. Una recuperación a buen ritmo resulta perfecta para los basses mas activos. Ojo con los días en los que tiene lugar eclosiones de insectos (como las hormigas de alas). Los peces pasto en frenesí suben a por ellas cuando caen al agua, y detrás de ellos es fácil adivinar quién sigue…

PESCA AL FINAL DEL OTOÑO

Por el contrario en los últimos meses del otoño tradicional (noviembre y mediados de diciembre) el comienzo del frío irá aletargando el comportamiento vital del bass, característica del  invierno que se aproxima. La disminución de temperatura del agua y los días mas cortos, provocarán que el black-bass descienda de nuevo a aguas más profundas.
Aquí lo más propicio si queremos practicar la pesca con swimbaits (ya que existen otras opciones posibles, como jigs, crankbaits suspendidos, etyc). será la elección de artificiales de hundimiento rápido para llegar a la zona donde se encuentra nuestro objetivo. En cualquier caso, la acción que imprimiremos a nuestros señuelos será más lenta que en meses predecesores.

Es difícil escoger cual sería la mejor fecha del año para el uso de swimbaits. O bien divertirse con los seguimientos, avistamientos y capturas de los meses pre-spawn o por el contrario disfrutar de la arrojo y decisión que tienen los peces en otoño. Ahora es lo que toca.

Reserva de pesca de la desembocadura del guadalquivir

Nueva reserva de pesca en la desembocadura del rio guadalquivir, inaugurada hace poco.
La Reserva se encuentra ubicada en la desembocadura del río Guadalquivir, ocupando una superficie total de 404 Km2. Comprende los últimos 16,5 Km del cauce principal del río, desde el Caño de la Esparraguera (Sevilla) hasta Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), hacia el sur; y la franja litoral del Parque Nacional de Doñana hasta el Pico del Loro (Huelva), en dirección norte. Sus fondos alternan entre superficies arenosas, por toda la franja litoral y fangosos más próximos a la zona de la desembocadura. Esto proporciona un hábitat adecuado a varias especies de moluscos bivalvos y también peces planos como el lenguado y la acedía, siendo éstas muy representativas en la zona. La Reserva se encuentra dividida en cuatro zonas en función de las características del medio físico y biológico, y de las pesquerías que en ella se desarrollan, aplicándose, en cada una de ellas, medidas de gestión específicas.
La reserva se divide en tres zonas: a,b,c y d.
Esta permitido pescar en todas las zonas, exepto en la zona a donde solo se permite el marisqueo a pie con licencia titulada.
Pulsa aqui para ver la pagina web de la reserva.